Iª Muestra Internacional de Piano de Aranda de Duero (Segundo día)

Por Ignacio Bahíllo Pelluz

Cuando el sábado 22 de octubre se abrieron las puertas de la Casa de Cultura de Aranda de Duero, resonaban todavía los ecos del espectáculo al que habíamos asistido dos días antes en aquel mismo escenario. La serenidad y el intimismo del piano de Chad Lawson y la elegancia de las clásicas piezas de Suzanne Ciani pusieron el listón muy alto para los participantes de la jornada sabatina. Sin embargo, sus actuaciones fueron, igualmente, memorables.

El primero en salir al escenario fue el arandino Mario López Santos. Impresionante. Se puede decir que jugaba en casa, que tenía al árbitro a su favor… Nada más lejos de la realidad. La ovación con la que fue recibido fue tan merecida como la que se llevó al despedirse. Es una pena que la mayoría de las veces busquemos fuera lo que ya tenemos en casa. Y es que Mario es un músico excepcional. Tanto por sus composiciones como por sus interpretaciones. Seducción, Luceros, Ilusiones, 1973… Una tras otra se iban deslizando sus composiciones mientras nos ofrecía un directo espectacular, combinando piezas de enorme sensibilidad con otras perfectamente rítmicas. Y en medio de cada pieza, Mario nos hablaba, dándonos explicaciones de una forma clara y concisa, demostrando su gran capacidad como pedagogo. Sus alumnos pueden estar orgullosos de su maestro. Y para terminar, su Tarantella Balcánica, dedicada especialmente a Alejandro Clavijo, promotor y alma mater de este encuentro de pianistas, y cuyo nombre estuvo siempre presente en todos y cada uno de los músicos participantes.

Luego salió Rocky Fretz. Debo reconocer que era una incógnita para mí. Apenas había oído antes un par de temas suyos extraídos de un disco recopilatorio. Pero la duda enseguida desapareció. Y ni siquiera le hizo falta empezar a tocar el piano. Solo con su presentación plena de un enorme sentido del humor ya se metió al público en el bolsillo. Y cuando empezó con el piano, fue como si el mundo se parase. Este hombre toca el piano como los ángeles. Sus dedos se deslizaban por el piano como si hubiera nacido ya con uno debajo del brazo. Sus composiciones surgen de la perfecta unión entre virtuosismo y técnica depurada, entre emoción y pura destreza interpretativa. Will’s Mountain, All We Are (Is In This Moment Now) o Kim’s Song, (llamada así porque su esposa Kim la eligió como la favorita de las composiciones de su marido), son una pequeña muestra de lo que este músico fue capaz de transmitir a una audiencia entregada, como no podía ser de otra forma, a su infinita calidad.


Pero faltaba la guinda del pastel: Will Ackerman. El mito. El hombre que con 300 dólares, sin darse cuenta, fundó Windham Hill y se convirtió en el padre de la música New Age. Estaba allí. Y no defraudó. Fue breve, pero intenso. Interpretó The Impending Death of the Virgin Spirit, contándonos a todos la dramática historia que llevaba detrás. Y pudimos escuchar, en las manos de su propio autor, cómo interpretaba la mítica The Bricklayer’s Beautiful Daughter, que él mismo se encargó de desmitificar. Y, para rematar la faena, a dúo con Rocky Fretz (de quien Will es amigo y, al mismo tiempo, productor), nos deleitó con Hawk Circle.

Fue el colofón perfecto para dos días inolvidables. Las palabras se quedan cortas para describir mínimamente los sentimientos y las emociones que estos cinco músicos destilaban en cada una de sus piezas, de sus interpretaciones. Si el mundo fuera medianamente justo, este acontecimiento habría sido portada en numerosos medios de comunicación y los que asistimos a aquellos conciertos, abarrotando por dos días aquel Salón de Actos, podremos decir: “Yo estuve allí”.


Haciendo click en este enlace podeis escuchar el programa especial de "Músicas Imaginadas", dirigido por Ignacio Bahíllo, dedicado a este evento. El programa se emitió el seis de octubre, unos días antes del concierto.

Fotos: Ignacio Bahíllo con Rocky Fretz y Will Ackerman, respectivamente.

Fotos cortesía de Yolanda Rossell.


Comentarios

  1. Genial este artículo, Ignacio!!!!

    Lástima gorda no haber podido quedarme también el día 22, pero las circunstancias no me ayudaron demasiado... En cualquier caso, leyendo tu crónica soy capaz de imaginar el ambiente, el concierto, las piezas, el ordenado tumulto del auditorio, la satisfacción de los artistas... Ya el día 20 fue algo inolvidable, y seguro que para quien pudo asistir al concierto del 22, como tú, también lo fue.

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  2. "Yo estuve alli" Y finalmente pudiste asistir aunque fuera a la segunda jornada?. Yo no estuve alli, pero leyendo tu cronica y la cronica de Irene de la jornada anterior, es como si hubiera asistido.
    De modo que mision cumplida. Han disfrutado y han trasmitido lo vivido...
    Y escuchar esas dos musicas en directo por William Ackerman...Pah...que momento....!!!JuanCarlos

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  3. GRACIAS COLEGA, COMPAÑERO Y AMIGO IGNACIO!!, GRACIAS POR ESTA MAGNÍFICA CRÓNICA, GRACIAS POR DIFUNDIR ESTA FANTÁSTICA MÚSICA Y SOBRE TODO, GRACIAS POR SER AMIGO!. TODO EL EVENTO FUE INOLVIDABLE Y LO LLEVO MUY CERQUITA DEL CORAZÓN, TE LO JURO!!!.

    Tu AMIGO en la música...
    Alejandro Clavijo
    -------------------------------
    www.reviewsnewage.com
    "Discovering Music"

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  4. Estoy de acuerdo con todos vosotros, la segunda jornada merecía una reseña, e Ignacio ha hecho un magnífico trabajo que nos ha trasladado a todos a aquellos momentos... felicito a Ignacio por su gran trabajo, y le agradezco mucho esta valiosa aportación al Búnker!!

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